ChatWatch, la aplicación que promete espiar a nuestros contactos de WhatsApp, vuelve a protagonizar titulares polémicos tras una resurrección.
Hace unos meses, apareció una app tanto en Play Store como en iTunes. ChatWatch anotaba las horas en las que tus contactos estaban conectados y las horas en las que estaban offline. La aplicación incluso llegaba a correlacionar datos para deducir la posibilidad de que dos de tus contactos estuvieran chateando entre ellos a tus espaldas.
De esta forma, ChatWatch incentivaba la paranoia que nació poco después del lanzamiento de WhatsApp. Propiciaba, por ejemplo, la aparición de la famosa pregunta: “¿Cariño, qué hacías en WhatsApp a las 3 de la madrugada?”.
Muchos usuarios empezaron a quejarse de ChatWatch porque ponía en peligro su privacidad. ChatWatch intentó camuflar sus intenciones cambiando su descripción: la app aseguraba que su función era ayudar a la gente a descubrir cuán enganchada estaba al móvil y cuántas horas de sueño perdían con ello.
Ni Google ni Apple se tragaron esa excusa y eliminaron ChatWatch.
Ahora, ChatWatch ha vuelto a los móviles pero la app ha cambiado. Si la instalas, jugarás a un juego de lo más burdo: esquivar iconos con forma del logo de ChatWatch que caen del cielo. Pero esta app te invita a visitar la página oficial de ChatWatch. Y aquí es donde empieza la “diversión”.
La web de ChatWatch (no pienso ponerla; si quieres entrar en una espiral de paranoia, eso es cosa tuya) hospeda el servicio de espiar por WhatsApp. Pero ya no es 100% gratuito: el servicio te ofrece una prueba gratuita de 24 horas. Cundo se acaba la prueba, te toca pagar.
Además, necesitas tener un ordenador siempre encendido con tu cuenta asociada de WhatsApp también conectada. Al fin y al cabo, lo que hace ChatWatch es observar los estados de tus contactos en WhatsApp, como una pareja co-dependiente y desconfiada.
Tras su reaparición, las quejas han resurgido. ¿Logrará ChatWatch sobrevivir en esta ronda o tendrá que desaparecer de una vez por todas?
